En la década de los 50 el médico alemán Ernest Gräfenberg describió una pequeña zona ubicada en la cara anterior de la vagina (si se hace el tacto podrÃamos decir que está adelante, a "las menos diez del reloj") cerca de la uretra femenina.
SerÃa un área que al tacto se nota algo elevada, con mayor sensibilidad erógena y que este médico relacionaba con la eyaculación femenina (un lÃquido que no es orina ni contiene espermatozoides). Al excitarse, algunas mujeres, en el momento del orgasmo expulsarÃan este lÃquido.
Si bien algunos investigadores describen la eyaculación femenina (llegué a ver pelÃculas donde mostraban este fenómeno) y colegas brasileños presentaron un trabajo en el Congreso Mundial de SexologÃa de Hong Kong (1999) donde hablaban de otros puntos similares (Punto A), muchos le restan importancia. El Dr. Gräfenberg (de la primera letra de su apellido viene el nombre de punto G o punto de Gräfenberg) decÃa que se producÃa, en algunas mujeres, la expulsión a través de la uretra, de un lÃquido claro y transparente en el momento culminante del orgasmo sin función lubricante ya que se emite en el final del acto sexual.
Promovidas por lecturas que relacionaban este punto con una mayor facilitación orgásmica, muchas mujeres se propusieron buscarlo obsesivamente, olvidándose que el cuerpo todo puede ser una extendida zona erógena. También es cierto que otras mujeres dicen que se excitan en mayor medida, logrando el orgasmo con facilidad cuando se estimulan (o lo hace su pareja) -además del clÃtoris- en el interior de la vagina, quizás en el famoso punto.
¿CÓMO ENCONTRARLO?
Si quisieras buscarlo lo más fácil es que te acuestes en la cama con algunas almohadas bajo la pelvis de tal manera que la entrada de la vagina quede elevada (similar a la posición ginecológica); luego que tu compañero lubrique sus dedos y tu vagina, y busque una zona más rugosa ubicada en la pared anterior (recuerda: "a la menos diez del cuadrante de un imaginario reloj"), sin presionar fuerte ni constantemente sino más bien suave y moviendo el dedo de derecha a izquierda y hacia atrás o en cÃrculos: o sea, pasar por el Punto G sin apretar ni concentrarse en él directamente.
" La segunda vez que fui con Alejandro, él procuró buscarme el punto G (yo habÃa intentado hallarlo antes), me introdujo sus dedos y palpó suavemente en mi interior hasta que sentà una gran excitación y él a su vez tuvo una sensación como que estaba en contacto con algo distinto: tuve un orgasmo diferente, intenso. Luego, mientras él me estimulaba el punto G, lo hacÃa también con el clÃtoris; les recomiendo hacerlo: es como tocar el cielo". Cecilia, 41 años, secretaria |
¿EXISTE EL PUNTO G EN LOS VARONES?
Se ha hablado que, en los varones, también existirÃa un Punto G situado cerca de la uretra pero, en realidad, se está hablando de la región prostática y no es fácil acceder a este lugar porque hay que realizar la introducción anal digital y tocar la próstata a través de las paredes del recto, cosa que a muchos varones les molesta o rechazan francamente. Hay quien describe mayor excitación con la estimulación y masaje de este punto con más rápida erección y mayor intensidad en la respuesta orgásmica con un eyaculado de chorro continuo y vigoroso.
"Me gusta que mi pareja me introduzca los dedos en el ano, profundamente, mientras me estimula oral y manualmente el pene; es una sensación incomparable y asà tengo los mejores orgasmos aunque otras veces lo hagamos de la manera tradicional". Carlos, 32 años, gerente |
Esto que quizás les parezca extraño es una práctica que llevan a cabo algunas parejas heterosexuales (incluso con el empleo de falos artificiales o "vibradores") y, por supuesto, las homosexuales que también lo hacen, obviamente, con el pene. Otros niegan este punto en los varones (lo relacionan sólo con la zona erógena anal) aduciendo que es una de las tantas fantasÃas con las cuales los humanos intentan aumentar su pasión.
EL PUNTO A
Cuando la expedición de búsqueda del Punto G estaba volviendo, algunos cientÃficos agregaron, en 1996, una nueva zona vaginal que, supuestamente, producirÃa rápidamente el orgasmo femenino. Lo llamaron Punto A (A-spot). EstarÃa ubicado en la misma pared vaginal pero más atrás, a medio camino entre el Punto G y el cuello de la vagina. De acuerdo con un grupo de investigadores la estimulación del Punto A producirÃa:
Mayor, más rápida y prolongada lubricación
Mayor excitación
Múltiples orgasmos
Las posiciones que favorecerÃan, durante la penetración, la estimulación de ambos puntos serÃan:
la mujer boca abajo y el varón detrás suyo
colocada la mujer sentada en el borde de la cama y él arrodillado delante
la mujer en posición como los animales ("more ferarum" = "como las fieras"), también popularmente llamada "del perrito" o "pecorina" (palabra que procede de la palabra "oveja" en italiano) o "picolina"
Si detectan, en la vagina, una zona con mayor sensibilidad erógena bienvenida sea, si ven salir una emisión profusa durante el clÃmax no se inquieten y disfrútenla, pero no se deberÃan sentir en menos o en falta "por no encontrar el bendito punto G".
Dr. Adrián Sapetti,
médico psiquiatra y sexólogo clÃnico,
Director del Centro Médico Sexológico