¿Fobia sexual y social?: Un testimonio femenino |
Actualmente estoy atravesando una depresión leve, he perdido peso y presento insomnio. Mi vida social ha declinado, evito reunirme con gran número de personas. Soy esquiva y tiendo a tratar a un reducido grupo de personas, pienso que muchas veces paso por mal educada. A pesar de gustarle a los hombres y recibir múltiples invitaciones, siempre los rechazo, por cualquier motivo aunque sea insignificante. Me atraen los hombres, sin embargo me repugna su olor y el intimar con ellos, por tal razón no he tenido novio. Cuando en un amigo percibo que quiere algo más que una amistad o le atraigo de forma platónica o aun sexual, corto su amistad lentamente de forma que no se dé cuenta. Aún persisten en mà sentimientos de culpa, aunque sé que eso está fuera de mà misma. Me incomodan que me abracen, no me agrada que me besen, siento repulsión a la saliva. A los 11 años de edad, en una vereda (Nota del director: pequeño pueblo) cercana a la urbanización donde vivÃa ocurrió algo -no sé si llamarle abuso sexual o no, puesto que estoy segura que no hubo coito, sin embargo fue una situación penosa-: yo me dirigÃa a mi casa luego del colegio, ese dÃa iba sola porque mi amiga se quedó charlando con otros amigos y amigas, y yo no deseaba llegar tarde a casa. En fin, entré a esa vereda para recortar camino a mi casa, cuando no sé de donde salió ese hombre me tomó por el cuello, yo querÃa gritar pero no podÃa. Me levantó hasta que mis pies no tocaban el piso, no recuerdo más nada, sólo recuerdo sus ojos, el cabello y cuando pasó su lengua por mi cuello y mi cara, sentà pánico. No recuerdo más que su camisa en el suelo. Realmente no sé cómo llegué a mi casa, no se si corrà o caminé. Sé que cuando llegué actué como si nada, sentÃa vergüenza. Nunca se lo dije a nadie, es la primera vez que esto sale de mÃ. Pienso que mi conducta con las personas cambió desde ese momento, mis amistades de esa etapa las alejé, sólo conservé una con la que, eventualmente, hablamos. Ahora estoy en la universidad en la mitad de mi carrera y tengo muy pocas amistades para el tiempo que llevo en la facultad. Siento una especie de estrés social, me cuesta el relacionarme con las personas en general, en especial con los hombres. Temo que interfiera con el desarrollo de mi vida personal y profesional. Con respecto a publicar mi testimonio, si usted lo cree conveniente y provechoso para otras personas, tiene mi plena autorización. Gabriela, 21, Colombia, 2003Nota del Dr. Sapetti: la lectora que ofreció su testimonio define con claridad cómo, el abuso sexual, con el estrés postraumático posterior, fue una de las causas -no siempre la única- de su fobia al sexo y a los contactos sociales Ãntimos. Por suerte sabemos que, hoy, estos problemas tienen solución. Como lectura complementaria recomendamos los siguientes artÃculos de sexovida.com: Fobias Sexuales, Trastorno por estrés postraumático, La consulta Sexológica, Las Terapias Sexuales, Un fantasma temido: la Depresión, El insomnio. |