JEAN GENET “¿Profeta o mártir?†|
Jean Genet, novelista, dramaturgo (recordemos “Las criadasâ€, “El balcónâ€, que fueron puestas varias veces por directores argentinos) y poeta francés, nació en ParÃs, el 9 de diciembre de 1910, murió también en ParÃs el 15 de abril de 1986. Hijo de padre desconocido, su madre era una prostituta que lo entregó a la asistencia pública que lo mantuvo hasta los ocho años. La sexualidad descarnada siempre se vio reflejada en sus obras. "...Internado de asistencia pública, me resultó imposible conocer más de mis orÃgenes. Al cumplir 21 años, conseguà una partida de nacimiento. Mi madre se llamaba Gabrielle Genet. Mi padre sigue siendo un desconocido. Yo habÃa venido al mundo en la calle Assas. El Nº 22 estaba ocupado por una Maternidad. Se negaron a darme información. Me criaron unos campesinos"; dice Genet de su infancia. A estos campesinos los hizo vÃctimas de sus primeros robos. Acusado por eso, a la edad de diez años, Genet se convirtió en un auténtico ladrón, pasó su adolescencia en prisiones juveniles y acabó prostituyéndose más tarde. En 1943 fue condenado a cadena perpetua y en la cárcel comenzó a escribir. “Abandonado por mi familia me parecÃa ya natural agravar este hecho mediante mi amor por los muchachos y por el robo, el robo mediante el crimen o la complacencia en el crimen. De este modo rechacé deliberadamente un mundo que me habÃa rechazado." En 1949, gracias al apoyo de Cocteau y otros intelectuales como Jean-Paul Sartre, obtiene el indulto.
Dice Sartre: en “San Genet, profeta o mártir": "Un niño expósito da prueba de sus malos instintos desde su más tierna edad, roba a los pobres campesinos que lo han adoptado. Lo reprenden e insiste, se evade de la penitenciarÃa para niños en la que han tenido que detenerlo, roba y saquea cada vez más y, por añadidura se prostituye. Vive en la miseria, de la mendicidad, de los hurtos, acostándose con todos y traicionando a todos, pero nada puede desalentarlo, es el momento que elige para dedicarse deliberadamente al mal; decide que hará lo peor en todas las circunstancias y, como se ha dado cuenta que la mayor fechorÃa no era obrar mal, sino poner de manifiesto el mal, escribe en la cárcel obras abominables que hacen la apologÃa del crimen y caen bajo el peso de la ley". Homosexual declarado y militante, en 1964, Genet queda deprimido por el suicidio de su amante Abdallah Bentaga. Toma la decisión de renunciar a la literatura y abandona Francia. Genet apoyará las causas de los desheredados y de los marginales y las minorÃas: a las Panteras Negras en los EEUU, adonde viaja en 1969 para hacer campaña a favor de la liberación de sus presos, y visitará luego a los palestinos, conviviendo con sus refugiados y guerrilleros en Jordania y el LÃbano entre 1970 y 1972.
“La sociedad tal como ustedes la conciben, yo la odio. Y siempre la odié, y la vomité… desde que encontré en la literatura un escape, ese odio tomó otra forma, menos personal…de un rencor nace una idea y esa idea se torna a medida que avanzo dentro de mi obra, más serena, más indestructible. Yo lo sé, doy testimonio: el orden social no se mantiene sino al precio de una infernal maldición que aflige a los seres dentro de los cuales los más viles, los más nulos están próximos de mÃ. Para siempre yo me hice intérprete de los despojos humanos, de los residuos que pudren nuestras prisiones, debajo de los puentes, en el fondo de la fétida pudrición de las ciudadesâ€. Jean Genet está enterrado en el antiguo cementerio español de Laranche, en una austera tumba frente al océano Atlántico. |